La habitación asignada fue muy pequeña y calurosa, la puerta de acceso de manos de 2 m de alto y el acceso complicado, una escalera de caracol muy incómoda. Sin embargo contaba con varias amenidades como micro, refri , estufa y utensilios, además te regalan café , thé y un poco de aceite y tiene platos y cubiertos. Volverían si pudiera tener una habitación en planta baja.